SEMANA SANTA 2011

Semana Santa otra vez,

nacida aquel Jueves Santo,

ya huele a cera y clavel,

al filo de la trompeta.

Hueles a incienso y a romero,

hueles a espinas y nardos

a quejido lastimero.

Dios te bendiga Saeta

que haces “saeta” la fe.

  La Semana Santa candeledana, como no podía ser distinto del resto de España, ha estado pasada por agua. Eso sí: agua bendita que riega nuestros queridos campos.

  Se inició con la procesión de la burrita el Domingo de Ramos. Y no llovió.

  Siguió con el programa del miércoles santo, con el pregón a cargo de D. JORGE ZAZO RODRÍGUEZ. La Banda de Música de Candeleda amenizó el acto con bonitas marchas procesionales de estas fechas. Tampoco llovió.

  El Jueves Santo, finalizados los oficios, se esperaba poder sacar la procesión: la lluvia lo impidió. Pero ello no fue óbice para que dentro del templo de Nuestra Señora de la Asunción, se organizara un acto de belleza singular: D. Eladio, sacerdote de Candeleda, con su buena entonada voz, acometió cantares religiosos, a los que respondió el maestro “cantaor de flamenco” Eloy Cortés Calderón, mientras los costaleros realizaron un breve recorrido con las imágenes dentro del templo.

  El Viernes Santo, a las ocho de la mañana, se inició el bello Vía Crucis por las calles de Candeleda, que finalizó sin contratiempos. Interiormente esperábamos que aquel día la lluvia permitiera iniciar la procesión de tan singular día. No fue posible. Y otra vez dentro del templo, ahora con la participación de D. José Ignacio, párroco de Candeleda, y la bellísima cantaora Tamara Alegre, se llevó a cabo un acto litúrgico con especial desarrollo: a las poesías del párroco, contestaba la saeta emocionada de “Mara”, y a esta seguía la marcha procesional de la Banda Municipal. Y otra vez, capataces y costaleros iniciaban un pequeño pero singular recorrido con los pasos que correspondían a tan señalada fecha.

  El Sábado Santo la procesión de “la Soledad”, para las mujeres. Se realizó sin contratiempos y con una masiva participación de personas de ambos sexos.

  El Domingo de Pascua apareció radiante. La procesión del Resucitado inició su recorrido tradicional, con el encuentro en el ”Castillo”, finalizando con la misa mayor.

  A continuación, en la sede de la Cofradía, el tradicional reparto del “cordero pascual” gratis, al que asistieron muchos comensales.

  Las noches del Jueves y Viernes Santo, después de los actos en la Parroquia, se celebraron verdaderas reuniones de hermandad en la sede de la Cofradía (Cámara agraria), con la actuación del artista de cada día, acompañados de afamados guitarristas.

  La celebración de la Semana Santa candeledana, aunque deslucida en parte por la lluvia, no mermó en nada el sentir cofrade de las hermanas y hermanos de la Muy Antigua y Verdadera Cofradía de la Santa Vera Cruz de Candeleda.

Ramón Lorente De la Luna